La naturaleza es fundamental para el desarrollo económico y social de la humanidad. Sin embargo, nuestras especies y ecosistemas están en peligro debido a prácticas insostenibles. Es urgente reconocer la importancia de la diversidad biológica y trabajar para conservarla.
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El Convenio sobre la Diversidad Biológica
El 5 de junio de 1992, en la «Cumbre de la Tierra» en Río de Janeiro, la comunidad internacional aprobó el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB). Este tratado internacional, que entró en vigor el 29 de diciembre de 1993, busca preservar la diversidad biológica y promover su uso sostenible.
Compromiso con la Sostenibilidad
El CDB refleja el compromiso global con el desarrollo sostenible. Su objetivo es conservar la diversidad biológica y garantizar una participación justa en los beneficios derivados de los recursos genéticos.
El Plan Estratégico para la Diversidad Biológica
En 2010, la Conferencia de las Partes del CDB adoptó el Plan Estratégico para la Diversidad Biológica 2011-2020 y las 20 Metas de Aichi. Estos marcan el camino para que los países desarrollen metas y estrategias nacionales en materia de biodiversidad.
Compromiso de Argentina
En Argentina, se ratificó el CDB en 1994 a través de la Ley 24.375. El país se compromete a implementar políticas ambientales y estrategias nacionales para cumplir con los objetivos del CDB y el Plan Estratégico.
La Importancia de las Metas Nacionales
Las Metas de Aichi y el Plan Estratégico brindan un marco de referencia para que cada país establezca sus propias metas y estrategias nacionales de acuerdo con sus circunstancias particulares.
El cuidado de la diversidad biológica es una responsabilidad compartida. Una planta trabaja para promover la conservación y el uso sostenible de las plantas. ¡Descubre más sobre nuestra labor en Una Planta.!
Imagen: Liberación de tortuga de laguna. MAyDS.