Las enfermedades respiratorias son muy comunes y, en la mayoría de los casos, se acompañan de tos. La bronquitis aguda es una de las afecciones respiratorias más frecuentes y para su tratamiento, la fitoterapia ofrece plantas medicinales con propiedades antitusivas, expectorantes y antisépticas de las vías respiratorias, que han demostrado ser muy eficaces.
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La bronquitis y la importancia de la fitoterapia
La bronquitis aguda es una enfermedad inflamatoria que afecta al árbol bronquial y se caracteriza por la inflamación de la mucosa bronquial. Esta inflamación puede ser causada por agentes infecciosos como bacterias o virus, así como por la exposición a irritantes como el humo o el polvo. Durante la bronquitis, se produce un edema en la mucosa y se genera un exudado mucopurulento que provoca la aparición de tos.
La tos es un síntoma asociado a muchas enfermedades respiratorias. Es un mecanismo de defensa del cuerpo que consiste en expulsar el aire acumulado en las vías respiratorias con el fin de eliminar las mucosidades y las sustancias extrañas que obstruyen dichas vías. La tos puede ser productiva, con eliminación de esputo, o improductiva, sin eliminación de este.
Es importante tener en cuenta que la tos productiva no debe suprimirse, ya que es útil y esencial para eliminar las secreciones acumuladas y evitar la obstrucción bronquial. Sin embargo, en ciertas circunstancias molestas para el paciente o en casos de riesgo, como en personas con problemas cardíacos, puede ser necesario suprimir temporalmente la tos. Para promover la expectoración se pueden utilizar plantas expectorantes y mucolíticas, y es importante mantener las vías respiratorias bien hidratadas.
Por otro lado, la tos improductiva se produce por irritación bronquial y suele ser seca y molesta. Esta tos no tiene un propósito fisiológico y puede ser aliviada mediante el uso de plantas medicinales con propiedades antitusivas y emolientes.
En caso de persistencia de la tos, es importante acudir al médico, ya que puede ser indicativo de una afección más grave. Suprimir la tos en estos casos podría dificultar el diagnóstico adecuado de la causa subyacente.
Las plantas medicinales con acción antiséptica respiratoria
Existen plantas medicinales que ejercen una acción antiséptica en las vías respiratorias y que pueden ser administradas por vía oral, ya que el organismo es capaz de eliminar sus principios activos a través de los alvéolos pulmonares, logrando así el efecto antiséptico esperado. Una de estas plantas es el eucalipto, que es muy utilizado en el tratamiento de las afecciones de las vías respiratorias altas.
El eucalipto contiene aceite esencial, flavonoides, triterpenos, taninos y ácidos fenólicos, entre otros componentes. Debido a su aceite esencial, el eucalipto tiene propiedades antisépticas respiratorias, fluidificantes de la secreción bronquial, expectorantes, antiespasmódicas y antiinflamatorias.
El eucalipto se utiliza en el tratamiento de enfermedades respiratorias como la bronquitis, el resfriado y la tos improductiva. También se usa para el asma, la sinusitis, la fiebre y la gripe. Además, puede ser aplicado tópicamente para tratar lesiones cutáneas y el acné.
El eucalipto se puede administrar de diferentes formas, ya sea en inhalaciones o por vía oral. Las formas de administración más comunes son el extracto seco y la infusión. Es importante tener en cuenta que el aceite esencial de eucalipto no debe ser usado en períodos prolongados ni en dosis mayores a las recomendadas debido a su posible toxicidad para el sistema nervioso. Además, su uso está contraindicado en caso de úlcera péptica, gastritis, embarazo, lactancia y en niños menores de 6 años.
Plantas expectorantes y mucolíticas
Las plantas con propiedades expectorantes ayudan a aumentar la producción de secreciones y a reducir su viscosidad, facilitando su expulsión. Además, estas plantas protegen la mucosa inflamada y reducen el efecto de la tos. Los principios activos responsables de esta acción expectorante pueden ser las saponinas o los aceites esenciales. Entre las plantas con acción expectorante debido a las saponinas se encuentra el regaliz, mientras que el tomillo es una planta con propiedades expectorantes gracias a su aceite esencial.
El regaliz contiene saponinas triterpénicas, flavonoides, cumestanos, hidroxicumarinas, aceite esencial y esteroides. Además de su acción antiulcerosa, el regaliz tiene un efecto expectorante debido a que las saponinas aumentan la producción de secreciones bronquiales al irritar la mucosa bronquial. También tiene propiedades mineralocorticoides, lo que significa que aumenta la reabsorción renal de sodio y agua y la eliminación de potasio.
El regaliz se utiliza para tratar la gastritis, la úlcera péptica, la tos improductiva y la bronquitis. Se puede administrar en forma de decocción o extracto seco, y su uso está contraindicado en caso de hipertensión arterial, arritmias cardíacas, diabetes tipo II, insuficiencia renal, síndromes relacionados con el exceso de estrógenos y durante el embarazo y la lactancia.
El tomillo contiene aceite esencial, flavonoides, ácidos fenólicos, saponinas y taninos. Su aceite esencial aumenta la actividad de los cilios bronquiales, lo que ayuda a expulsar las secreciones. Además, tiene propiedades antisépticas respiratorias y espasmolíticas. El tomillo se utiliza en casos de tos irritativa y bronquitis. Se puede administrar en forma de infusión o extracto seco, y su uso durante el embarazo y la lactancia no está recomendado debido a la falta de datos que avalen su seguridad.
Plantas antitusivas y emolientes
Entre las plantas antitusivas destacan aquellas con acción antiespasmódica, como la drosera, que actúa directamente sobre el músculo bronquial evitando la producción de espasmos y, por lo tanto, la tos. Además de estas plantas, las que contienen mucílagos, como el llantén y la malva, también son muy útiles como antitusivos. Los mucílagos son polisacáridos que tienen la capacidad de absorber agua y formar geles, lo que los convierte en excelentes emolientes para reducir la irritación de la garganta y la mucosa bronquial, calmante la tos.
Estas plantas son seguras de usar, ya que tienen pocos efectos adversos. Sin embargo, es importante asegurarse de tomar suficiente agua al ingerirlas, ya que pueden causar obstrucciones gastrointestinales. También es posible que retrasen la absorción de otros principios activos, por lo que se recomienda tomarlas separadas de otros medicamentos.
El llantén mayor contiene mucílagos, iridoides, flavonoides, taninos y sales minerales. Se utiliza para tratar el resfriado común, la tos improductiva, la bronquitis y la faringitis. Se puede administrar en forma de decocción o extracto seco, y su uso está contraindicado en caso de obstrucción esofágica, oclusión intestinal, obstrucción intestinal o dolor abdominal desconocido, así como durante el embarazo y la lactancia.
La malva contiene mucílagos, flavonoides, taninos y antocianos. Tiene propiedades demulcentes, antitusivas y antiinflamatorias. Se utiliza en casos de tos improductiva, bronquitis y faringitis. Se puede consumir en forma de extracto fluido o infusión, y presenta las mismas contraindicaciones que el llantén debido a su contenido de mucílagos.
La drosera contiene naftoquinonas, flavonoides, taninos, mucílagos y sales minerales. Tiene propiedades antiespasmódicas y broncodilatadoras, lo que la convierte en un antitusivo eficaz. Se utiliza en casos de tos improductiva y bronquitis, y también se ha utilizado para el tratamiento del asma. Se puede consumir en forma de infusión o extracto seco, y su uso durante el embarazo y la lactancia no está recomendado.
Ahora que conoces algunas de las plantas medicinales más efectivas para tratar las afecciones respiratorias, recuerda siempre consultar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier tratamiento. ¡Cuida de tu salud y respira mejor con la ayuda de la fitoterapia!
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