¿Quién no ha disfrutado alguna vez de una taza de té de manzanilla, anís, yerbabuena o tila para aliviar el malestar estomacal, mejorar la digestión o relajarse? ¿Quién no ha oído hablar de plantas como el árnica, el cuachalalate, el gordolobo, la salvia, la cola de caballo o el boldo?
Según la Secretaría de Salud, el 90% de la población mexicana ha optado por utilizar alguna de las 4,500 plantas medicinales de México al menos una vez en su vida. Nuestro país ocupa el segundo lugar a nivel mundial en términos de flora medicinal documentada, según comenta Roberto Campos Navarro, académico de la Facultad de Medicina de la UNAM.
La botánica ha sido una medicina accesible y eficaz para los pueblos y las comunidades de México. Desde el Códice De la Cruz-Badiano hasta las investigaciones modernas realizadas por prestigiosas universidades y centros de conocimiento, se ha demostrado el conocimiento que tenemos sobre las plantas medicinales y su uso en pueblos y ciudades.
Por ejemplo, la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) ha registrado alrededor de 3,000 especies de plantas con atributos medicinales, de las aproximadamente 4,000 que se estima que existen en México. Estas representan el 15% de la flora mexicana total. Sorprendentemente, solo se ha realizado análisis farmacológico del 5% de estas plantas. De ese universo, aproximadamente 250 se comercializan de manera cotidiana. Sin embargo, el 85% de ellas se extrae de la naturaleza sin planes de manejo sustentable. Por otro lado, el 80% de la población mexicana ha utilizado alguna planta medicinal en algún momento de su vida.
Desde machacarlas para hacer emplastos hasta prepararlas en infusiones, raíces, cortezas, frutos, semillas, bulbos y cáscaras nos ofrecen remedios para aliviar, curar y mantener la salud física, emocional, mental y espiritual. Implementar el uso de plantas medicinales puede mejorar nuestra calidad de vida a un menor costo e incluso promover una mayor longevidad.
Es cierto que los principios activos o compuestos químicos presentes en estas plantas son los ingredientes primarios utilizados en muchos medicamentos comerciales patentados por la industria farmacéutica.
A continuación, presentamos una pequeña selección de algunos conocimientos desarrollados principalmente por pueblos y comunidades indígenas, transmitidos de generación en generación, sobre plantas medicinales comúnmente utilizadas en México:
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Bugambilia
Esta pequeña y hermosa flor blanca, que adquiere colores vivos gracias a sus hojas modificadas o brácteas, crece en racimos en una planta trepadora. Principalmente, las variantes de color fucsia, magenta y rojo se utilizan como antitusígeno, antipirético y expectorante. En otras palabras, combaten la tos seca, reducen la fiebre y ayudan a eliminar la mucosidad de las vías respiratorias altas. Además, mejoran el sistema respiratorio, promoviendo el correcto funcionamiento de los pulmones y la oxigenación del cuerpo. Su uso medicinal tradicional es muy común en los estados del centro y sur de México, especialmente para tratar infecciones respiratorias como la tos, el asma, la bronquitis y la gripe. Sin embargo, las hojas de esta planta pueden causar estreñimiento, mientras que sus raíces poseen propiedades laxantes. Además, tienen propiedades antisépticas y, cuando se aplican en la piel, ayudan a combatir el acné, las infecciones y la descamación, así como a acelerar la cicatrización de las heridas si se aplican como una infusión fría.
Momo, Acuyo, Tlanepa o Yerba Santa
El Piper auritum, también conocido como Acuyo o Yerba Santa, es una planta aromática de uso comestible que también ayuda a reducir la fiebre, tiene propiedades relajantes, favorece el buen funcionamiento intestinal y alivia los dolores estomacales. Desde la época prehispánica se conocían sus usos medicinales y, durante la Colonia, los sacerdotes españoles se maravillaron con sus propiedades curativas y la llamaron «Santa». Sus propiedades antiinflamatorias ayudan a reducir la inflamación vaginal y estomacal. Tomarla en forma de té alivia la tos y la congestión respiratoria. Además, mantiene los niveles adecuados de glucosa en la sangre, aporta vitamina C y previene enfermedades respiratorias como el asma, el reumatismo y la irritación ocular.
Muitle, Muicle o Hierba de la Virgen
Este arbusto es un poderoso regenerador de la sangre. Cuando se prepara en infusión, libera un color rojizo que se atribuye a sus magníficas cualidades curativas. Se le añaden frutas para elaborar un tónico que combate la anemia. Además, se utiliza para combatir la diabetes y las diarreas de diferentes orígenes. También tiene propiedades desintoxicantes, digestivas, antipiréticas y antibióticas. Según un estudio del Centro Universitario de los Lagos, el muitle disminuye los síntomas de abatimiento y desesperanza en casos de depresión y ansiedad si se usa de manera regular. También se utiliza para atenuar los síntomas emocionales asociados con la menopausia, como mal humor, tristeza e irritabilidad. Sus extractos son efectivos como enjuagues bucales, favorecen la desinfección de heridas y estimulan el funcionamiento del sistema inmunológico. Las hojas del muitle poseen propiedades fluidificantes que favorecen la secreción de mucosidad en el sistema respiratorio causada por bacterias o virus. También es sumamente efectivo para despejar las vías respiratorias mediante vaporizaciones.
Tomillo
El tomillo es una hierba aromática utilizada en alimentos, pero también es un excelente antibiótico y antiinflamatorio. Además, tiene propiedades antibacterianas, antivirales, expectorantes, digestivas, mucolíticas, hipotensivas, antioxidantes, carminativas, analgésicas, antisépticas, antifúngicas y demulcentes (protectoras de las mucosas digestivas). Su aceite esencial, obtenido de sus pequeñas hojas, es útil para fortalecer las vías respiratorias cuando se aplica en el pecho, garganta, sienes, nuca y planta de los pies.
Cebolla
Además de ser ampliamente utilizada en la cocina, la cebolla es un excelente antibiótico natural. Atrae a los microbios, por lo que se recomienda poner una cebolla partida en cuatro en cada esquina de la habitación de alguien enfermo para purificar el ambiente, reemplazándola diariamente. También es común su uso en los velorios para evitar la contaminación.
Vaporub
El Vaporub es un remedio popular utilizado contra el vómito, las náuseas, las infecciones del oído, el dolor de muelas o garganta, las quemaduras, la dermatitis y como antiséptico. Es un descongestionante de las vías respiratorias y combate la tos seca, disminuyendo los síntomas del resfriado. Se puede cultivar fácilmente en macetas o jardines al aire libre, ya que crece rápidamente. Además, posee propiedades antiinflamatorias, antidiabéticas, descongestionantes y antiansiedad. Se recomienda tomarla caliente o como agua de tiempo en casos de enfermedades respiratorias.
Guayaba
Las hojas del guayabo tienen propiedades curativas. Son antisépticas y se utilizan para combatir la diarrea, el acné y las espinillas. Además, protegen la piel contra los daños causados por los radicales libres y previenen el envejecimiento prematuro. Debido a sus propiedades diuréticas y su alto contenido de potasio, las hojas de guayaba son ideales para prevenir la retención de líquidos y la inflamación. Masticar sus hojas ayuda a aliviar el dolor de muelas y las úlceras bucales. También ayuda a controlar la sensación de hambre, lo que ayuda a mantener un peso saludable y previene enfermedades respiratorias gracias a su alto contenido de vitamina C, que previene gripes, resfriados, tos y dolor de garganta.
Estos son solo algunos ejemplos de los valiosos conocimientos desarrollados por los pueblos y las comunidades indígenas de México. A través de generaciones, han transmitido sabiduría sobre el uso de plantas medicinales. Su utilización ha mejorado la calidad de vida de muchas personas y ha demostrado que la naturaleza nos ofrece tesoros medicinales al alcance de todos.
FAQs
¿Las plantas medicinales de México tienen efectos secundarios?
Al igual que con cualquier tipo de medicamento, es importante utilizar las plantas medicinales con precaución. Algunas plantas pueden tener efectos secundarios o interactuar con otros medicamentos. Siempre es recomendable consultar con un experto o realizar una investigación exhaustiva antes de utilizar una planta medicinal de forma regular.
¿Dónde puedo conseguir plantas medicinales de México?
Existen tiendas especializadas, herbolarios y mercados donde se pueden encontrar plantas medicinales. También puedes cultivarlas en tu jardín o en macetas si tienes espacio. Sin embargo, es vital obtener las plantas de fuentes confiables y asegurarse de conocer las dosis y formas adecuadas de uso.
¿Es seguro automedicarse con plantas medicinales?
No se recomienda automedicarse con plantas medicinales sin la debida orientación de un experto. Cada planta tiene propiedades específicas y puede interactuar con otros medicamentos o condiciones de salud. Es importante buscar asesoría profesional para garantizar un uso adecuado y seguro de las plantas medicinales.
Conclusión
Las plantas medicinales de México son un tesoro natural que ha sido utilizado durante siglos para aliviar y mejorar nuestra salud de manera natural. Aunque debemos tener precaución al utilizarlas, su efectividad y beneficios respaldan el conocimiento ancestral transmitido por nuestros antepasados. En «Una Planta», estamos comprometidos con la difusión de estos conocimientos y el valor de la naturaleza en nuestras vidas. ¡Descubre más sobre el fascinante mundo de las plantas medicinales en Una Planta!