Imagen de la plantación de pistachos en San Juan
La visita del ministro de Producción y Desarrollo Económico, Ariel Lucero, al impresionante polo pistachero en el departamento de 25 de Mayo, reveló el crecimiento alcanzado por los productores y las proyecciones a corto plazo: en tres años, se espera que haya alrededor de 9 mil hectáreas de pistacho en San Juan.
El ritmo de crecimiento estimado es de 1,500 hectáreas por año, lo que se sumaría a las actuales 5,000 hectáreas. Estas cifras, respaldadas por la incipiente Cámara Argentina de Pistacheros, afirman el liderazgo de San Juan como el principal productor de pistacho del país.
En el recorrido por el paisaje de 25 de Mayo, se aprecia el asombroso avance del pistachero, que ha florecido en una tierra virgen donde nadie había tenido el coraje de sembrar nada.
Se observa todo el proceso del pistacho, desde la reproducción de plantas en vivero, pasando por las diferentes etapas de crecimiento, hasta la cosecha y el procesamiento en la fábrica.
«Esta es una de las industrias que más ha prosperado dentro de las actividades productivas primarias de la provincia y tiene un futuro prometedor. El gobernador Sergio Uñac nos insta constantemente a crear condiciones para apoyar el potencial de cada una de estas actividades», comentó Lucero.
Para el año 2022, como parte del programa «Menos impuestos, más inversión» del Gobierno de San Juan, que reemplaza los impuestos locales por inversión privada, se han presentado 37 empresas con proyectos por un valor de 7.000 millones de pesos. Tres de estas empresas presentaron proyectos relacionados con el pistacho.
El pistacho es un fruto seco que tiene una creciente demanda a nivel internacional y mantiene un precio estable de 10 dólares por kilogramo.
Cuando todas las hectáreas de la provincia estén en producción, representarán aproximadamente el 10% del total de las exportaciones provinciales, en comparación con las exportaciones actuales de San Juan.
«Esta actividad está generando empleo y desarrollo, y desde el Estado queremos seguir creando condiciones para que pueda seguir creciendo. Los productores nos piden la oportunidad de expandir la superficie, pero necesitan importar material genético y semillas para ampliar los viveros», señaló Lucero.
Además, los productores necesitarán importar maquinaria adicional para la cosecha cuando las hectáreas alcancen su plena producción en un par de años.
El crecimiento del polo pistachero implica la creación de empresas de servicios relacionadas con la cosecha y el mantenimiento de equipos, lo que se traduce en más puestos de trabajo.
En poco tiempo, los productores han logrado profesionalizarse en cada una de las etapas del proceso, incluso vendiendo plantines a otras provincias como Mendoza.
El circuito
Imagen del vivero de pistachos
La visita comenzó en la finca de Facundo Balboni, que cuenta con plantas en diferentes etapas de crecimiento. Balboni también tiene un vivero donde no solo vende plantas, sino que también brinda asistencia técnica a aquellos interesados en cultivar pistachos.
«El crecimiento en este sector no tiene límites, siempre y cuando la situación socioeconómica y política del país lo acompañe. En cuanto a mi propio crecimiento, me encantaría llegar a tener 1,500 hectáreas. Ahora tengo 500 hectáreas plantadas, pero todo dependerá de las circunstancias del país. Además, desde que estoy aquí, en 2015, la provincia siempre nos ha brindado un gran apoyo, tanto por parte del ministro como de otras áreas del gobierno, en aspectos fundamentales como el suministro de energía», comentó Balboni.
Luego, fue el turno de la finca de los hermanos Bolsonella, Alejandro y Gustavo, quienes cuentan con una plantación que es un verdadero orgullo provincial.
«Venimos de trabajar en chacras desde siempre y nos cansamos de luchar. Empezamos como productores, empacadores y exportadores de ajo y cebolla. Finalmente, decidimos enfocarnos en nuestro negocio principal, que es el vivero de plantas de vid, que ya lleva tres generaciones. Ahora, nos hemos embarcado en esto del pistacho pensando en nuestro futuro y en frenar un poco el ritmo», afirmó Alejandro.
Finalmente, el grupo formado por el ministro, el secretario de Agricultura, Ganadería y Agroindustria, Martín Gómez; Facundo Balboni, Raúl Albiñana y Patricio Vallejo, llegó a la finca de Marcelo Nemirosky, propietario de Pistachos de Los Andes, que cuenta con una planta de procesamiento de pistachos única en su tipo.
Marcelo llegó a San Juan en 1997 gracias a un diferimiento impositivo, pero no quería dedicarse a los cultivos tradicionales, así que optó por el pistacho. Fue uno de los tres pioneros que se aventuraron en este fruto seco sin antecedentes en la provincia.
Confesó que le llevó más de 10 años involucrarse con la finca y perdió un tiempo valioso. Ahora es un apasionado de la producción de pistachos.
Lucero concluyó el recorrido al resaltar las líneas de crédito con tasas negativas disponibles en la provincia para el sector.
«Nuestro objetivo es desarrollar, en conjunto con el sector público y privado, la posición de los pistachos argentinos en el mundo. Hemos logrado, junto con el gobierno nacional y la Embajada Argentina en Brasil, abrir el mercado brasileño al pistacho argentino y, en particular, al pistacho de San Juan. Además, existen oportunidades para nuevos mercados», destacó el ministro.
Fuente: Una Planta