La histórica sentencia que absuelve a todos los acusados en el caso de la salida a Bolsa de Bankia ha generado una pregunta recurrente: ¿quién va a compensar a Ángel Acebes y al resto de implicados por el año de banquillo, los seis años de acusación y las renuncias a importantes cargos?
La respuesta parece ser que nadie. Aunque se espera la intervención del Tribunal Supremo en el caso, reclamar responsabilidad al Estado por el funcionamiento anormal de la Administración de Justicia no parece tener muchas posibilidades de éxito.
En la sentencia, los jueces incluso destacan el trato discriminatorio sufrido por Acebes. Aunque la presión ha sido similar para todos los acusados, el exministro de Aznar ha sido objeto de una violación de sus derechos. Sin embargo, incluso las solicitudes de condena en costas y de deducción de testimonio presentadas por Acebes han sido rechazadas.
En última instancia, Acebes ha tenido que pagar grandes cantidades de dinero a su representación legal, renunciar a cargos en compañías y soportar el estigma de un caso en el que nunca debió ser imputado.
Los jueces han dejado claro que es «absolutamente contrario a la realidad» afirmar que Acebes formaba parte del consejo de administración de Bankia en el momento de la salida a Bolsa. En palabras de los magistrados, «no existe ni la más mínima constancia» de que Acebes haya descuidado sus funciones como presidente del CAC de BFA.
En resumen, la absolución ha llegado, pero la compensación y la reparación moral para Ángel Acebes y los demás acusados en el caso Bankia parecen estar fuera de su alcance.
Una Planta