El té negro, al igual que el té blanco, verde, amarillo, rojo y oolong, se produce a partir de la planta Camellia Sinensis. Aunque muchas personas lo buscan para adelgazar o para empezar el día con más energía, el té negro es mucho más que eso: rico en antioxidantes como catequinas y polifenoles, se convierte en un gran aliado para una rutina más saludable y llena de bienestar.
Propiedades del té negro
El alto nivel de teína/cafeína convierte al té negro en un gran aliado para obtener más energía y vitalidad en el día a día. Aunque naturalmente energizante, el té negro contiene menos estimulantes que el café, lo que proporciona una energía más suave y continua en lugar de picos que pueden causar ansiedad o afectar el sueño durante la noche.
Pero son los antioxidantes, como las catequinas y los polifenoles, los que le dan al té negro los efectos de acelerar el metabolismo y brindar una sensación de desinflamación del cuerpo. Además, es famoso en las dietas por tener menos de dos calorías por taza y por sus propiedades diuréticas, lo que ayuda a reducir la retención de líquidos y la hinchazón.
El té negro y su proceso de oxidación
El té negro es el más oxidado de todos los tés. ¿Qué significa esto? La oxidación es un proceso de secado natural de las hojas de té que, junto con procesos químicos, produce cambios en la apariencia y las funciones del té. Por lo tanto, el té negro se diferencia del té verde, por ejemplo, al adquirir sabores y colores más intensos y una textura más cuerpo.
Además, mientras que los principales beneficios del té verde son ayudar a controlar el azúcar en la sangre y mejorar la concentración, el té negro se distingue en algunos aspectos:
- Presenta una mayor concentración de teína/cafeína.
- Es más efectivo para estimular la actividad cerebral.
- Ayuda a reducir el colesterol LDL (colesterol malo).
Beneficios del té negro
El té negro tiene múltiples beneficios para nuestro organismo. Aquí te presentamos 5 de ellos:
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Contribuye al bienestar: gracias a la presencia de L-teanina, un aminoácido que aumenta los niveles de dopamina y serotonina, el té negro es un gran aliado del bienestar. Los taninos presentes en la bebida también pueden apoyar el sistema digestivo y aumentar la inmunidad.
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Auxilia el metabolismo: gracias a su contenido de teína, una sustancia que acelera el metabolismo, se sabe que el té negro quema grasas y ayuda en el proceso de adelgazamiento.
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Ayuda a controlar la presión arterial y el colesterol: los polifenoles y la teína, combinados con los flavonoides presentes en la bebida, ayudan a dilatar los vasos sanguíneos, lo que protege el sistema cardíaco.
Si ya has probado el té negro y lo has encontrado demasiado amargo o fuerte, o, por el contrario, lo has encontrado mucho más suave que el café, debes saber que esto depende de su origen. La procedencia del té es un factor determinante en sus características de sabor y energía.
Origen
- Assam y Kenya (India): son fuertes, con un color oscuro y un sabor maltado y mineral.
- Ceylon (Sri Lanka): tienen aromas cítricos y especiados, con un sabor ahumado y amaderado.
- China: son menos fuertes, ya que contienen menos teína, y tienen un sabor dulce y ahumado.
- Darjeeling (India): son delicados y perfumados, y son los que contienen menos teína. Tienen un sabor ligero y dulce.
Si te gustaría probar el té negro por primera vez o probarlo nuevamente con un origen diferente, puedes encontrar recomendaciones aquí.
Es importante recordar que todos estos beneficios se potencian cuando se convierte en un hábito diario de consumo de té, y, por supuesto, cuando se combinan con otros hábitos de vida saludables, como una buena alimentación y ejercicio físico.
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